Aprovechando restos

Mi hijo tuvo que llevar al cole arcilla blanca, de esa que no necesita cocción, al regresar le había sobrado casi la mitad, como estaba abierta pensé que habría que gastarla pronto antes de que se endureciera, así que después de comer me puse manos a la obra.
Con un rodillo la aplané y con diversos utensilios de esos que andan por casa (tapones de bricks, tapas de botes ...) fui cortando círculos de diversos tamaños.
Luego pensé que todos así quedarían un poco sosos y con una vela en relieve le hice el dibujo.
Unas cuantas bolas hechas  a mano,  los agujeros (aunque a algunos se me olvidó hacérselos y ahora no sé que voy a hacer con ellos) y a dejar secar.
Ya duros, un poco de lija , pintura acrílica negra , un poco de pintura plateada de dedos y barniz.,
El cordón con nudos franciscanos y ya está.

Con el resto de las piezas que corté todavía no he hecho nada, cuando venga mi amiga la inspiración por aquí tengo que hablarle de esas piezas a ver si a ella se le ocurre algo.
       Que paséis un buen día.